Se trata del emprendimiento de una escuela; que apunta a un taller de cocina que funciona con energías renovables y que propicia la formación de equipos de trabajo. De esta forma, se logra que la desocupación baje considerablemente y que muchas familias posean su ingreso autogestionado. Hablamos de la escuela 6010, de San Francisco, es quien puso en marcha este emprendimiento ante la falta de trabajo; y para ello contó con la invalorable colaboración de las autoridades comunales, a través de Acción Social. El establecimiento educativo es pionero en cocina alternativa, cría de animales de granjas y en tener huertas a los fines de alcanzar la provisión de comida saludable. Pero no se quedaron en eso: en esa misma reunión el presidente comunal, Juan Downes, planteó la necesidad de contar con una panificadora, dado que en la localidad no se elabora pan. En San Francisco viven unos 300 vecinos. Es uno de los pueblos más pequeños del sur santafesino y vive prácticamente aislado de otras localidades habida cuenta de que no tiene accesos asfaltados. De ahí el trabajo mancomunado a la hora de producir su propia comida que en principio será para los integrantes de la escuela pero la idea es hacerla extensiva a toda la comunidad.