MILAGRO EN TEODELINA

Uniones en la fe, cadenas de oración y niños semi ahogados por la tierra que volaba dieron su resultado: el milagro ocurrió hoy por la mañana. Luego que los vecinos se unieran durante varias jornadas en oración y lo dieran a conocer ayer en este medio; las autoridades comunales decidieron enviar -todavía no se sabe si de lástima o porque se dieron cuenta que hacía dos meses que no pasaba-, el regador a la zona de calle Los Flamencos donde ésta termina en la laguna. Tras varios reclamos, pareciera que los gobernantes indicaron a la persona responsable que el regador no solo debía arrojar agua en determinado sitio del pueblo, sino que había que hacerlo también en la zona precitada. Con alegría, mientras los niños corrían como si hubieran visto un plato volador, los vecinos recibieron hoy por la mañana el "agua bendita" de la Comuna.