Una gran polémica se ha generado en el territorio santafesino a partir de la media sanción que otorgó la Cámara de Diputados provincial a un proyecto que prohibe el uso de glifosato en campos a una distancia menor a los 500 metros del área urbana determinada por los municipios y comunas. Incluso en nuestro pueblo, las versiones se contradicen. Por ese motivo, nuestro medio consultó a dos ingenieros agrónomos, quienes mostraron pareceres diferentes en principio, pero congruentes en líneas generales. Por ejemplo, uno de ellos sostuvo que “hay una lucha o algo en contra del glifosato. Nos prohiben al sector agropecuario utilizar el glifosato a menos de 500 metros de las áreas urbanas, pero no se dice nada sobre los otros productos. Argentina tiene alrededor de 35 mil productos registrados, y el glifosato es uno de ellos. Con esta ley quiere decir que los otros 34999 los podemos seguir usando, aunque sean más complejos y volátiles. El uso responsable de los agroquímicos pasa por utilizarlos bajo las condiciones que se prescriben y en los lugares que corresponde”, apuntó. Por otra parte, coincidió con su colega en que -en el caso de tener que suplantar el glifosato con otro producto, "dudo que haya alguno que sea menos dañino, porque son los que usábamos antes en la soja Entonces tendríamos que volver a utilizar graminicidas altamente volátiles y latifolicidas que quedan de 3 a 6 meses en el suelo", indicó. En alguna oportunidad, desde este medio publicamos una nota realizada a la ingeniera Permingeat, quien sostuvo que “el glifosato es menos tóxico que la aspirina”. Con ella coincide otro de los ingenieros consultados por este medio, indicando que "al analizarse los productos, drogas, medicamentos o lo que sea, hay un índice que se llama “dosis letal 50”. Esto es, a partir de qué dosis resulta letal o qué grados de toxicidad o daño tiene. Esas pruebas se hacen en laboratorio con ratas, a las que se aplican distintas dosis para probar la toxicidad. La dosis que se necesita en glifosato llega a 5.600 miligramos, es decir mucho en relación por ejemplo a un piretroide (el que se usa para combatir el dengue en las zonas urbanas) que con 2.400 mata a las ratas y en relación con la aspirina que con 800 miligramos mata a las ratas. Es decir, son mucho más tóxicos estos últimos dos productos que el glifosato". Sin embargo, el detalle más curioso llegó al final de la charla, cuando los dos ingenieros consultados indicaron que "resulta curioso que ahora, justo antes de las elecciones, sale todo esto a la luz. Está claro que se quiere indisponer a la población en contra de los productores. Lo que se quiere, claramente, es confundir a la población", remarcaron. La polémica sigue.
GLIFOSATO: VERDAD CONSECUENCIA
Una gran polémica se ha generado en el territorio santafesino a partir de la media sanción que otorgó la Cámara de Diputados provincial a un proyecto que prohibe el uso de glifosato en campos a una distancia menor a los 500 metros del área urbana determinada por los municipios y comunas. Incluso en nuestro pueblo, las versiones se contradicen. Por ese motivo, nuestro medio consultó a dos ingenieros agrónomos, quienes mostraron pareceres diferentes en principio, pero congruentes en líneas generales. Por ejemplo, uno de ellos sostuvo que “hay una lucha o algo en contra del glifosato. Nos prohiben al sector agropecuario utilizar el glifosato a menos de 500 metros de las áreas urbanas, pero no se dice nada sobre los otros productos. Argentina tiene alrededor de 35 mil productos registrados, y el glifosato es uno de ellos. Con esta ley quiere decir que los otros 34999 los podemos seguir usando, aunque sean más complejos y volátiles. El uso responsable de los agroquímicos pasa por utilizarlos bajo las condiciones que se prescriben y en los lugares que corresponde”, apuntó. Por otra parte, coincidió con su colega en que -en el caso de tener que suplantar el glifosato con otro producto, "dudo que haya alguno que sea menos dañino, porque son los que usábamos antes en la soja Entonces tendríamos que volver a utilizar graminicidas altamente volátiles y latifolicidas que quedan de 3 a 6 meses en el suelo", indicó. En alguna oportunidad, desde este medio publicamos una nota realizada a la ingeniera Permingeat, quien sostuvo que “el glifosato es menos tóxico que la aspirina”. Con ella coincide otro de los ingenieros consultados por este medio, indicando que "al analizarse los productos, drogas, medicamentos o lo que sea, hay un índice que se llama “dosis letal 50”. Esto es, a partir de qué dosis resulta letal o qué grados de toxicidad o daño tiene. Esas pruebas se hacen en laboratorio con ratas, a las que se aplican distintas dosis para probar la toxicidad. La dosis que se necesita en glifosato llega a 5.600 miligramos, es decir mucho en relación por ejemplo a un piretroide (el que se usa para combatir el dengue en las zonas urbanas) que con 2.400 mata a las ratas y en relación con la aspirina que con 800 miligramos mata a las ratas. Es decir, son mucho más tóxicos estos últimos dos productos que el glifosato". Sin embargo, el detalle más curioso llegó al final de la charla, cuando los dos ingenieros consultados indicaron que "resulta curioso que ahora, justo antes de las elecciones, sale todo esto a la luz. Está claro que se quiere indisponer a la población en contra de los productores. Lo que se quiere, claramente, es confundir a la población", remarcaron. La polémica sigue.
