Anoche, por enésima vez, quienes debieron conducir un automóvil por las calles de nuestro pueblo, supieron lo que es la ineficacia de quien comanda la organización del tránsito en Teodelina. Aún así, las autoridades siguen sosteniéndolo. Inexplicable...pero real. Circular ayer domingo por cualquiera de las calles que rodea la plaza central de nuestro pueblo fue solo parangonable a hacerlo en un pueblo del lejano oeste: la ley del "más macho" se impone: grandes motos (cuyos conductores circulan sin casco) se apoderaban de la acera sin importarle los autos que trataban de esquivarlos en todo momento; mientras menores de edad mostraban (tal como es costumbre) lo que son capaces de hacer a bordo de sus bi rodados. Párrafo aparte merecen ciertos conductores de automóviles (en muchos casos, también menores de edad) corriendo las picaditas alrededor de la plaza. Algunos vecinos de la misma, indicaron que dentro de los que corrían picadas también había un empleado comunal...
Mientras tanto, y gracias a Dios, la "chatita gris" estaba semi oculta (para mí que tienen miedo) en la rotonda de la plaza... ¿Inspectores...? bien, gracias. En cierto momento, el chofer de la misma se decidió a moverse de lugar. Puso en marcha "la chatita gris" y encnedió las luces... bah, "la" luz: solo funciona una. Más no desesperemos: en uno o dos fines de semana, algún pibe muerto debajo de las ruedas de alguno de estos descerebrados que circulan impunemente amparados por la ineficiencia hará que nos rasguemos las vestiduras y organicemos reuniones en el Club de los Abuelos pidiendo seguridad a gritos. Mientras tanto, el Juzgado de Faltas continúa "cerrado" e inactivo. ¿Algún día las autoridades se dignarán a demostrarle al pueblo que de verdad les interesa nuestra seguridad, incluida la vial?.